Curso de Firma y Facturación Electrónica

Uno de los principales objetivos que se persigue mediante la creación y puesta en funcionamiento de la administración electrónica es acercar distintos servicios a la ciudadanía y favorecer la competitividad de las empresas, sea cual sea su ubicación geográfica. De hecho, su implantación y popularización permite realizar todo tipo de trámites a través de la red de redes, lo que propicia sustanciales ahorros en cuanto a costes y tiempos. No en vano, su uso implica el poder evitar las habituales esperas, el toparse con el hecho de que la documentación aportada es insuficiente y los, en ocasiones, largos, lentos e incluso penosos desplazamientos hasta las sedes administrativas, que, a su vez, suponían también un obstáculo para favorecer el desarrollo sostenible, al llevar aparejados gastos en carburantes de origen fósil y, por tanto, emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera.

En cualquier caso, el uso de la administración electrónica o la formalización de cualquier contrato (por ejemplo, de compraventa) de forma telemática exige contar con garantías suficientes de seguridad en las gestiones, ya sea entre particulares, entre personas físicas y jurídicas, entre empresas, o con las administraciones. Por tanto, es preciso contar con los medios necesarios para acreditar la identidad de los participantes en el proceso. Y, para ello, existen distintos instrumentos, como son:

• El DNI electrónico (DNIe), que se usa como medio de autenticación de la identidad, como medio de firma electrónica de documentos, como medio de certificación de la integridad de un documento o como documento de viaje.
• La firma electrónica, que es un instrumento óptimo para la declaración de voluntad de los sujetos firmantes y que funciona mediante un sistema de claves asimétricas, que han de poseer el emisor y el receptor.
• El certificado electrónico, que es un documento firmado electrónicamente por un prestador de servicios de certificación, que vincula unos datos de verificación de firma a un firmante y que confirma su identidad.

Entidades obligadas a emitir facturas electrónicas

A través de este curso de Firma y Facturación Electrónica, se explicarán las claves para identificarnos digitalmente y para conocer si la identidad de aquellos con los que vayamos a realizar alguna gestión o formalizar un contrato es genuina; para realizar pagos electrónicos con seguridad; o para emitir facturas electrónicas, algo que es actualmente obligatorio (según se especifica en el artículo 4 de la Ley 25/2013, de 27 de diciembre, de Impulso de la Factura Electrónica y Creación del Registro Contable de Facturas en el Sector Público) para las siguientes entidades, siempre y cuando hayan entregado bienes o prestado servicios a la administración pública:

• Sociedades anónimas
• Sociedades de responsabilidad limitada
• Personas jurídicas y entidades sin personalidad jurídica que carezcan de nacionalidad española
• Establecimientos permanentes y sucursales de entidades no residentes en territorio español en los términos que establece la normativa tributaria
• Uniones temporales de empresas (UTEs)
• Agrupación de interés económico, Agrupación de interés económico europea, Fondo de Pensiones, Fondo de capital riesgo, Fondo de inversiones, Fondo de utilización de activos, Fondo de regularización del mercado hipotecario, Fondo de titulización hipotecaria o Fondo de garantía de inversiones.

Atendiendo a las ventajas del uso de las nuevas tecnologías, contar con conocimientos en cuanto a firma digital y facturación electrónica permitirá al alumno mejorar su currículo y, con ello, también su empleabilidad, especialmente si desempeña sus funciones en el área administrativa; y agilizar la ejecución de las gestiones usuales de su día a día, incluso en el ámbito privado.

Objetivos del programa

¿A quién está dirigido?