Curso Práctico sobre el Impuesto sobre Sociedades

La necesidad de competir en mercados internacionales ha hecho imprescindible la adaptación al derecho comunitario de buena parte de la normativa que afecta a las empresas, algo que contribuye, entre otras cuestiones, a que puedan competir en igualdad de condiciones y a que se combata, de un modo más eficaz, el fraude fiscal. De ahí la última revisión del Impuesto sobre Sociedades, una figura impositiva que, junto con el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), constituye uno de los pilares básicos de la imposición directa en España.

Se trata de un tributo de naturaleza personal que grava la renta de las sociedades y demás entidades jurídicas conforme a la normativa especificada en la Ley 27/2014, de 27 de noviembre, y que, si bien sigue la misma estructura del tributo que ya se definió en 1996, proporciona una revisión indispensable, al incorporar una mayor identidad a dicha tasa, alejándola aún más de su papel inicial de complemento del IRPF, y al buscar:

• Neutralidad, igualdad y justicia
• El incremento de la competitividad económica
• La simplificación del impuesto
• La adaptación de la norma al derecho comunitario
• La estabilidad de los recursos y consolidación fiscal
• La limitación de la deducibilidad de gastos financieros, que favorece indirectamente la capitalización empresarial
• La seguridad jurídica
• La lucha contra el fraude

Claves para satisfacer adecuadamente las obligaciones tributarias

Atendiendo a lo expuesto, es evidente que quien aspire a ofrecer servicios de consultoría en la materia ha de conocer a fondo el texto normativo, puesto que solamente así podrá contribuir a que las entidades a las que asesore satisfagan adecuadamente sus obligaciones tributarias formales, se beneficien de las posibles deducciones y eviten, además, la doble imposición internacional, utilizando, para ello, los mecanismos adecuados y sin que en ningún caso las acciones que promueva impliquen que la empresa incurra en alguna de las infracciones y sanciones tributarias a las que se hace referencia en la Ley General Tributaria.

A lo largo de este Curso Práctico sobre el Impuesto de Sociedades, el alumno aprenderá todo lo necesario para poder asesorar a todo tipo de organizaciones en la satisfacción de sus obligaciones fiscales al respecto; no en vano, la materia que se desarrolla está dirigida especialmente a profesionales que precisen iniciarse en los fundamentos y en la especialización que requiere la correcta gestión del Impuesto de Sociedades, y que busquen poder aprovechar, además, todos los mecanismos legales de ahorro fiscal disponibles, para conseguir reducir en la medida de lo posible la factura fiscal.

Se trata de un curso eminentemente práctico para cuyo seguimiento no se requieren conocimientos contables previos, dado que se parte del hecho de que el Impuesto sobre Sociedades toma la contabilidad como punto de partida y la técnica contable no interviene en la interpretación de la norma fiscal.

Asimismo, cabe destacar que, a medida que avance en la materia, el alumno irá descubriendo las últimas reformas fiscales aplicadas al impuesto, así como los regímenes transitorios estipulados. De hecho, durante su proceso de aprendizaje, se mantendrá al día de cualquier modificación de normativa, puesto que el curso cuenta con un apartado exclusivo dedicado a las actualizaciones en la materia. Además, incluye jurisprudencia sobre la materia del Impuesto de Sociedades, criterios de aplicación de la Dirección General de Tributos y múltiples casos prácticos resueltos y sin resolver, a fin de que el alumno se pueda enfrentar a situaciones reales que contribuyan a reforzar su aprendizaje y a que este sea significativo.

Objetivos del programa

¿A quién está dirigido?